La Dificultad de Mantener la Armonía en un Equipo de Élite
Ser considerado el mejor equipo en el mundo del ciclismo, en términos de victorias, trae consigo tanto ventajas como desafíos. Uno de los principales obstáculos que enfrenta el UAE Team Emirates es la necesidad de mantener la satisfacción de cada uno de sus miembros. Este equipo cuenta con ciclistas de la talla de Tadej Pogacar, Joao Almeida, Juan Ayuso, Jay Vine, Pavel Sivakov, Brandon McNulty, Marc Soler, Isaac del Toro y Adam Yates, todos capaces de liderar sus propias escuadras en otras competiciones. Sin embargo, hasta el momento, el equipo ha logrado conservar una fachada de armonía, a pesar de incidentes como la notable negativa de Ayuso de colaborar con Pogacar durante el último Tour de Francia.
Competencia Interna y Presión entre Ciclistas
La competencia por liderar las diferentes carreras se convierte en un reto cotidiano para los corredores del UAE. Adam Yates, quien recientemente defendió su título en el Tour de Omán, expresó que la atmósfera de trabajo duro dentro del equipo es contagiosa. “Cuando ves que todos están trabajando tan duro, te afecta. Todos van a entrenar para encontrar sus límites; te sientes un poco ‘tonto’ si no lo haces tú mismo”, comentó a Wielerflits.
El equipo participa en la mayor parte del calendario competitivo, lo que les brinda múltiples oportunidades a sus ciclistas. Sin embargo, según Yates, esto no es suficiente. La constante necesidad de demostrar un alto nivel de rendimiento es imperativa, ya que cualquier vacilación podría llevar a que otros corredores ocupen los puestos de liderazgo que un ciclista esperaba. “En un equipo como UAE siempre estás compartiendo un poco el liderazgo. Pero eso también es parte del éxito. Todos quieren ser los mejores y deben defender su territorio; si no estás a la altura, hay otros listos para reemplazarte”, afirmó.
El Giro d’Italia como Objetivo Principal
Para Yates, el Giro d’Italia es su gran meta del año, y competirá como líder junto a Juan Ayuso. Sin embargo, la falta de buena química entre ambos es notoria. Tras un evento polémico en el Tour, Yates mencionó que tuvo que asumir la responsabilidad de liderar cuando otros deportistas no estaban a la altura. “Tuve que hacer mi trabajo temprano porque algunos muchachos no estaban en posición”, expresó, mostrando la complejidad de la dinámica del equipo.
Además, Yates tendrá una doble tarea este año, ya que, después del Giro, se integrará al Tour de Francia como gregario de Pogacar por tercer año consecutivo. Esta agenda coincide con la de su hermano, Simon Yates, quien se une al Visma y también competirá en el Giro, con planes de ser gregario de Jonas Vingegaard durante el Tour.
Relaciones y Rivalidades dentro del Equipo
Adam Yates ha mencionado que su relación con su hermano es muy cercana, a pesar de que ambos estarán compitiendo en diferentes líneas. “Será un gran rival, sí. Nos conocemos muy bien y aún hablamos todos los días. Mi objetivo es ganar allí, pero no será fácil”, declaró. Esta dinámica evidencia no solo la presión personal que sienten los ciclistas, sino también cómo las rivalidades pueden afectar sus relaciones en el contexto competitivo.
Sobre su vínculo con Pogacar, Yates destacó: “Hemos tenido una buena relación desde el principio. No corrí mucho con él en mi primer año, pero eso ha cambiado en los últimos dos años. Siempre hacemos buenas carreras juntos, y eso hace que sea más natural trabajar para él.” La experiencia colectiva y la capacidad de ganar en equipo parecen ser la clave para mantener la cohesión en un grupo donde las individualidades luchan constantemente por la visibilidad y el reconocimiento.
El Reto de la Excelencia Constante
La competencia interna en equipos de elite como el UAE Team Emirates es un aspecto constante que, aunque desafiante, también es fundamental para el éxito general del grupo. Los ciclistas no solo deben trabajar en sus habilidades individuales, sino que también deben aprender a colaborar y apoyar a sus compañeros, aunque eso implique sacrificar sus propias aspiraciones individuales a favor del triunfo conjunto.
A medida que la temporada avanza, estos corredores se enfrentarán a más desafíos y presiones en su búsqueda de la gloria, sabiendo que en cada competición hay otros dispuestos a tomar su lugar. En este entorno, el balance entre mantener un equipo fuerte y ofrecer oportunidades a todos es más crucial que nunca, convirtiendose en una batalla tanto dentro como fuera de la carretera.